
De ahí que sea tan relevante estar consciente de los predictores de un buen envejecimiento, de forma tal que la vejez sea a la larga una experiencia positiva. Lograr un envejecimiento satisfactorio y con altos niveles de bienestar no es una cuestión de azar, más bien es un elemento en el que uno puede incidir. Para ello es indispensable adoptar un enfoque preventivo y promover en las personas habilidades que potencien hábitos saludables. Lo anterior es válido ya sea en el plano físico, psicológico o social. Entre los principales predictores de un buen envejecer destacan:
El nivel educacional
La educación que alcanza una persona se relaciona con un alto nivel de satisfacción con la vida. La educación proporciona herramientas para una mejor adaptación y mejores oportunidades en la sociedad. Esto puede permitir superar las desigualdades a las cuales las personas suelen verse enfrentadas. Si bien este es un factor que se refiere principalmente a la educación formal que se adquirió en las primeras etapas de vida, hoy está de moda la idea de formación continua, como una forma de proporcionar más herramientas a quienes busquen fortalecer sus capacidades personales y aumentar el acceso a oportunidades.
En cuanto a los adultos mayores, cada vez más lejos va quedando la imagen de una persona encerrada en su casa y sin nada que hacer. Por el contrario, se está dando paso a personas más activas, con intereses y ganas de continuar perfeccionándose a todo nivel.
El nivel de salud
La salud es un factor que claramente afecta al bienestar de los adultos mayores. Cuanto más sana sea la persona, mejor calidad de vida tendrá. La salud afecta la percepción de bienestar y satisfacción. Las personas que poseen un mejor estado de salud suelen a sentirse más satisfechas. Por el contrario, quienes presentan niveles de salud lo cual les impide realizar sus tareas diarias son proclives a sentirse menos satisfechas. Esto último contribuye a una peor calidad de vida.
A nivel del adulto mayor en este tema aún queda mucho por hacer en nuestro país. En el área de la salud aún las condiciones de atención no son las mejores para nuestros adultos mayores. Lo anterior sobre todo en el sistema público de salud. Además, este grupo realiza muchas consultas médicas y suele consumir más fármacos que otros grupos etáreos. Últimamente se han acentuado las enfermedades como diabetes, colesterol alto e hipertensión. Todas estas son enfermedades que pueden prevenirse con hábitos de vida saludables.
Sentimiento de autoeficacia
Esto consiste en la convicción personal de que se puede realizar exitosamente cualquier actividad en la cual uno se comprometa. Esta capacidad facilitará la vejez, ya que tiene que ver con la actitud al enfrentar situaciones complejas. La autoeficiencia ayuda a asumir el desafío de llegar a ser un adulto mayor. Ayuda también a afrontando las dificultades que conlleva el día a día, lo que se refleja en el propio bienestar. Esto facilita también el desarrollo de habilidades para enfrentar eficazmente situaciones adversas.
Realizar actividad física
Es muy importante la realización de ejercicios. Es relevante la movilidad corporal para mantener el metabolismo en buen estado. También lo es para mantener el organismo en buenas condiciones. Cuando se realiza actividad física se mantiene una vida más sana y activa. Lo anterior suele relacionarse con una buena calidad de vida.
Diversas investigaciones han concluido que practicar ejercicio puede ser un porte relevante para obtener un envejecimiento satisfactorio. Se ha observado que ciertos síntomas asociados a de la vejez podrían ser causa de la inactividad más que del propio envejecimiento. El sedentarismo conlleva a un deterioro de la salud y a un envejecimiento prematuro. Esto hace al sistema cardiovascular vulnerable, volviendo frágiles los sistemas óseos y musculares, aumentando el riesgo de obesidad y permitiendo el aislamiento y la depresión. En definitiva, ofreciendo una apariencia más vieja que aquella que por cronología le correspondería a la persona.
Realizar actividades significativas
Los adultos mayores que tienen proyectos de vida y buscan los mecanismos para llevarlos a cabo, se mantienen activos y con ganas de vivir. La realización de actividades significativas les permitirá también poder relacionarse con otros. Estas prácticas son indicadores relevantes de una buena vejez. En cuanto a las actividades de recreación, vemos que hoy día los adultos mayores están más activos. Muchos tienen incluso más deseos que otras generaciones de realizar actividades fuera de casa. De esta forma cada día proliferan más la oportunidades para expandir el círculo social para este grupo.
Relaciones afectivas
Dar y recibir afectos se considera un elemento fundamental para la plenitud de las personas. Esto se encuentra vinculado con una vida satisfactoria y se relaciona con participación e inclusión social. Cuando esta condición acompaña el transcurso de la vida, se presume que en general estará presente en la vejez. Entre los vínculos significativos que establecen las personas durante su vida, destacan los afectos familiares. Estos entregan altas dosis de bienestar a los adultos mayores, sobre todo por el apoyo social que brindan.
No solo es relevante el tamaño ni la cantidad de las redes de apoyo que un adulto mayor pueda tener. También lo es la satisfacción que ellos perciben respecto a dichas redes sociales.
Para más información relacionada a la mantención de un estilo de vida saludable para nuestros adultos mayores, le invitamos a visitar el siguiente link.
Elementos predictores de una buena vejez
Los adultos mayores que habitan en su domicilio tienen una mayor posibilidad de presentar mayores índices de calidad de vida. Esto en relación con aquellos adultos mayores que viven de allegados o en residencias. Contáctese con nosotros, nuestros servicios de cuidados domiciliarios le ayudarán a mantener sus rutinas saludables en la comodidad de su propio hogar.


